Este domingo por la mañana se llevó adelante la 8ª cita del campeonato mundial de Fórmula 1, el Gran Premio de Mónaco, donde Franco Colapinto finalizó 13º luego de haber largado en el puesto 18º de la grilla. Su compañero de equipo, el francés Pierre Gasly, debió abandonar prematuramente en la vuelta 9. El abandono se produjo tras una rotura en la suspensión izquierda de su monoplaza, consecuencia de un toque desde atrás al piloto de Red Bull, Yuki Tsunoda.
Para el piloto argentino fue una carrera sin sobresaltos, quién en durante las 78 vueltas no cometió errores e hizo una óptima administración de los neumáticos. El mismo Colapinto declaró post carrera: “La carrera fue muy aburrida, como salir un domingo a la mañana con la familia a la ruta”, haciendo referencia a lo monótonas que son últimamente las carreras en Mónaco debido al tamaño de los monoplazas actuales y la dificultad que ello conlleva para adelantar en pista.
De esta manera, Colapinto reivindicó, en cierto punto, lo que venía siendo un fin de semana regular para él y su equipo, en primer lugar debido a su falta de adaptación al auto, y en segundo lugar, por la complejidad del trazado del circuito de Mónaco, con los muros muy cerca y las curvas ciegas, característica típica de un circuito callejero.
La próxima competencia para el pilarense será el fin de semana próximo, entre los días 30 de mayo y 1 de junio, cuando se dispute el Gran Premio de España en el tradicional circuito de Montmeló, Barcelona. Será una nueva oportunidad para seguir sumando experiencia y buscar un buen resultado en suelo europeo.
